Duración 2 horas
Distancia 6 Km
Dificultad baja
La Olla de San Vicente es sin duda un destino turístico perfecto para disfrutar en familia. De ahí que en pleno verano sea uno de los puntos asturianos más masificados si queremos naturaleza y diversión a partes iguales. Ir en septiembre nos permitirá disfrutar de su hermoso paisaje con un poco más de libertad.
Si este es vuestro caso, y aunque ya no apriete tanto el calor, es fundamental que tanto para los adultos como para los niños contéis con provisiones suficientes para hacer la ruta de forma tranquila y sin sobresaltos.
Es un recorrido de ida y vuelta sin paradas establecidas ni bares o restaurantes en los que comprar comida y bebida, por lo que nuestro consejo habitual es en esta ocasión más necesario que nunca: meter en vuestras mochilas una botella de agua mineral natural FUENSANTA. Lo ideal es que lo hagáis de acorde a vuestro peso/estatura. Es decir: los niños pueden llevar en sus mochilas las botellas pet Kids de 0,33cl. mientras que los adultos pueden ocuparse de las de 1 l. o 1,5l.
Si ya estáis con todo lo necesario entre los pueblos de Tornín y Miyares, a la izquierda y antes de cruzar el puente sobre el río Dobra dará comienzo la ruta: justo donde leéis Restaurante Puente Dobra. ¡Es el momento de comenzar a andar!
El camino es amplio y va paralelo al cauce de agua, por lo que no tiene pérdida. En el trayecto podréis disfrutar de una vegetación abundante de olmos, sauces y robles. Un pocos más adelante, nos encontraremos con el Puente Dobra cimentado sobre una roca de cuarcita blanca y con un solo ojo. Solo disfruta de sus vistas ya que no debemos cruzarlo, simplemente continuamos de frente por el margen derecho del río.
Mientras avanzamos por el camino marcado, podemos apreciar las pozas y marmitas de aguas cristalinas que invitan al baño. Os recomendamos esperar y disfrutar ya llegados a la playa fluvial, ¡si es que podéis resistiros!
Disfrutando del paisaje nos encontraremos con un sendero más estrecho que incluye algunos tramos con rocas, por lo que te recomendamos que no pierdas de vista a los niños. En caso de que sean pequeños, necesitarán un poco de ayuda para cruzar, pero no implica dificultad. Ojo si ha caído rocío la noche anterior o ha llovido, ya que las rocas pueden estar húmedas y acaben provocando algún resbalón.
Pasado “el peligro” el camino vuelve a ensancharse y… ¡llegamos! Alcanzaremos una pradera y justo detrás de unos frondosos árboles tendremos la ansiada meta: una preciosa poza de aguas verdes, rodeada de rocas y vegetación con el sello de Paraíso Natural. Nada menos que una playa fluvial con su característica agua fría recién llegada de Picos de Europa.
Pasado el momento del baño para los más valientes y del recreo para los que no lo son tanto, es momento de emprender el camino de vuelta. No os olvidéis nada antes de emprender el regreso que discurre por el mismo camino que a la ida. ¡Mantengamos el planeta y Asturias limpia de residuos! Os recordamos que nuestras botellas de agua mineral natural FUENSANTA con 100% reciclables.
¡Gracias por acompañarnos en #DeRutaconFUESANTA! Nos vemos en la próxima.
[Foto de Turismo Asturias]